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La influencia jesuita en la fundación de EEUU y en su actual gobierno

22 abr 16. Para entender cómo los jesuitas y el Vaticano traman sus planes para controlar países y organizaciones mundiales hay que profundizar en temas tan densos y engorrosos como las Bulas Papales y la Ley del Almirantazgo Marítimo, en las cuales se basa todo la actual legislación internacional a la que se acogen la práctica totalidad de países.

Hoy día cualquier sistema político y legislativo que se intente implantar sin acogerse a ellas está abocado al fracaso porque la presión y el vacío del resto de países abortaría cualquier intento de disidencia.

Bula Papal

Buscando un simil más o menos acertado para entender este subterfugio por el cual el papa, entiéndase el Imperio Romano Vaticano, se autoproclamó en el siglo XIV con la Bula "Unam Sanctam Ecclesiam" dueño de nuestras vidas, imaginemos un terreno propiedad de nadie que se lo adjudica a través del pertinente registro el primer espabilado que detecta el vacío legal.
Es decir, el papa sentó desde entonces las bases para justificar y respaldar jurídicamente bajo un total sigilo y una trampa tan increíble y desconocida como ridícula su derecho a continuar legislando nuestra pertenencia al Sacro Imperio Romano Vaticano.

Ley del Almirantazgo Marítimo

Esta ley fue originalmente creada para controlar navíos que atracaban en el extranjero en busca de recursos y productos para importar y exportar, adaptada para los asuntos financieros y mercantiles, pero no los civiles. Esta ley sólo se aplica a quien acepte someterse a ella.

La definición de Ley Marítima de Comercio la explica como una ley privada internacional que gobierna las relaciones entre las entidades privadas que comercian en los océanos. Pero a través de la manipulación sagaz del lenguaje, una forma de ley que fue creada para gobernar corporaciones, negocios y navíos, ha sido impuesta para prevalecer como tal sobre las personas naturales.

Existen dos tipos de leyes: las de la tierra y las del mar. En la Ley del Mar todo se registra o inscribe como corporaciones, y se hace con letras mayúsculas, a diferencia de las leyes terrenales donde seríamos seres humanos inscritos con letras minúsculas.

Los Estados Unidos nacieron con una Constitución de tendencia calvinista bajo la denominación de United States for América (en minúsculas).

Tras la guerra civil, que según algunos autores fue provocada por la Orden de los Jesuitas, el incipiente país quedó endeudado con la City de Londres (ver qué es y qué significa esta City) debido a los préstamos que precisaron ambos bandos para la contienda.

Como fianza, la City controlada por los Rothschild, y por ende por Jesuitas-Vaticano, impuso que toda la población de aquel incipiente país registrara sus nombres con MAYÚSCULAS y fuese incluida como valores en bolsa.

Como requisito, el país inicialmente fundado como United States for América pasó a denominarse UNITED STATES OF AMERICA (en mayúsculas) y cayó de lleno en la Bula Papal y en la Ley del Mar.

George Washington y los jesuitas en la fundación de EEUU

Según la Iglesia de Roma, George Washington fue bautizado en la fe católica unas pocas horas antes de su muerte por el sacerdote jesuita Padre Leonard Neale. Este hecho, difícil de probar del todo, se ha venido rumoreando entre católicos desde hace 200 años.

Sin embargo un hecho cierto y comprobable es la influencia jesuita en la Revolución Americana, sobre todo a través de la familia Carroll.

John Carroll (fundador de Georgetown College que más tarde se convertiría en la Universidad de Georgetown, y primer obispo católico de los Estados Unidos) fue un sacerdote jesuita que trabajó con George Washington y Benjamín Franklin. Charles Carroll de Carrollton (primo de John Carroll, signatario sobreviviente de más edad de la Declaración de Independence) era un jesuita capacitado, y devoto al jesuitismo por su propia profesión. Su primo, Daniel Carroll (hermano mayor de John Carroll, signatario de los Artículos de la Confederación y la Constitución, el hombre quien donó el terreno sobre el cual fue construido el Capitolio de los E.E.U.U) era un buen amigo de George Washington y fue capacitado por sacerdotes jesuitas en su Universidad de St. Omer en Flanders.

La Enciclopedia Appleton’s de Biografía Americana, 1891, dice:
“No existía ningún poder mayor de combinación riqueza, intelecto y entusiasmo en algún lugar de Estados Unidos que en la unión de los Carroll y los jesuitas…”

La misma fuente dice del sacerdote jesuita John Carroll que:
“Durante la lucha por la independencia él prestó servicios importantes para su país por medio de sus cartas a sus amigos en todo lugar de Europa, explicando la situación. Al finalizar la guerra los católicos romanos de los Estados Unidos estaban ansiosos por ser librados de la jurisdicción eclesiástica del vicario apostólico de Londres, y el clero le presentó una petición al Papa para que nombrase un superior sobre ellos quien juraría lealtad solo al gobierno de su país. El nuncio papal en París consultó al Dr. Franklin y, a solicitud de este último, el Padre Carroll fue nombrado superior del clero de los Estados Unidos en 1784.”

Fue más tarde Abrahan Lincoln quien encontró la muerte por oponerse al modelo bancario impuesto por el Vaticano.

El control jesuita tras bastidores

El sello de los Estados Unidos guarda una notoria semejanza con el escudo de la mayor Universidad Jesuita de la nación norteamericana, la Universidad de Georgetown.


Dicha Universidad fue fundada por el sacerdote jesuita y primer obispo de los Estados Unidos John Carroll en el año de 1789, mismo año en que fue elegido como primer presidente George Washington.

Carroll redactó una oración en el momento de la inauguración de Washington pidiendo la bendición de Dios sobre el Presidente, el Congreso y el gobierno de los Estados Unidos. En gratitud al apoyo de John Carroll durante la guerra, Washington le regaló una versión modificada del sello de los Estados Unidos (águila con flechas en las garras ahora con orbe y cruz) a la institución que ahora es la Universidad de Georgetown, y ese sello está todavía en uso.

En Estados Unidos hay 28 Universidades y 50 Colegios Jesuitas de enseñanza superior. Esto representa la mayor concentración de influencia de la Orden Jesuita, más que en ningún otro país del mundo, tomando en cuenta que ellos tienen representación en 112 países.

Lo que usualmente no se considera es: ¿Por qué fueron ellos formados y cual es su objetivo? ¿Por qué la mayoría de norteamericanos no sabe incluso que los Jesuitas existen?

El Arzobispo católico romano James E. Quigley dijo el 5 de Mayo de 1903 al diario Chicago Daily Tribune lo siguiente:
"Dentro de veinte años este país (Estados Unidos) va a gobernar el mundo. Reyes y emperadores pasarán a la historia y la democracia de Estados Unidos tomará su lugar... Y cuando los Estados Unidos gobiernen el mundo entonces LA IGLESIA CATÓLICA GOBERNARÁ EL MUNDO... ¡Nada puede oponerse a la Iglesia!.

Una de las máximas jesuíticas cita que quien controla la educación controla el futuro. No cabe la menor duda del éxito logrado si vemos en este ejemplo a sus aventajados alumnos copar cargos de relevancia en el gobierno de Obama:

Coadjuntor Temporal Jesuita, Leon Panetta. Director de la Agencia Central de Inteligencia. Universidad Jesuita de Santa Clara.

Coadjuntor Temporal Jesuita, Robert Gates. Secretario del Departamento de Defensa. Universidad Jesuita de Georgetown.

Coadjuntor Temporal Jesuita, Joe Biden, Vicepresidente con dos grados honoríficos, uno en la Universidad de Scranton y el otro en la Universidad "Saint Joseph".

Jon Favreau, Escritor Oficial de Discursos de Obama. Educado en el Colegio Jesuita "Holy Cross".

Janet A. Napolitano, Secretaria General del "Department of Homeland Security" (Departamento de Seguridad de la Patria). Educada en el Colegio Jesuita de Santa Clara. Dama de Malta (Miembro de la Militar y Soberana Orden de Malta).

Jane Oates, Asistente Secretario de Empleo y Formación. Educada en el Colegio Jesuita de Boston.

Gabriella Gomez, Asistente Secretario de Legislación y Asuntos del Congreso. Educada por los jesuitas en la Universidad "Loyola Marymount".

Martha Kanter, Subsecretario de Legislación y Asuntos del Congreso. Educada por los jesuitas en la Universidad de San Francisco.

Bob Shireman, Asesor Principal del Secretario de Legislación y Asuntos del Congreso. Educado por los jesuitas en la Universidad de San Francisco.

Julius Lloyd Horwich, Asistente Diputado del Secretario de Legislación y Asuntos del Congreso. Educado por los jesuitas en la Universidad de Georgetown.

Otros importantes miembros de la Administración Obama/Biden que resultan también ser educados por los jesuitas son:

Douglas Shulman, actual Comisionado del IRS (Internal Revenue Service). Doctorado en la Universidad Jesuita de Georgetown.

John O. Colvin, Juez Jefe de la Corte de Impuestos de EEUU. Doctorado en la Univesidad Jesuita de Georgetown.

General Davis H. Petraeus, actual y más importante General del Ejército de los Estados Unidos de Norteamérica. Graduado de la Escuela Jesuita de Georgetown para el Servicio Extranjero.

En definitiva, Estados Unidos nació con normas muy bien camufladas a la población que le someten al Imperio Británico como una extensión o colonia suya. Tanto la Corona Británica como la City de Londres, artífice de la expansión británica en siglos pasados y centro de poder financiero, están bajo control Vaticano y de los mismísimos jesuitas que susurraban consejos a los oídos del masón George Washington.

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